Con mucha voluntad y determinación, el joven trabajador puso en marcha su emprendimiento llamado "El Lobito".
En el corazón del barrio San Pedrito, entre avenida Eva Perón y Tello, un joven de 22 años llamado Leonardo Alemán decidió dar un paso audaz hacia su futuro.
Desde hace apenas tres días, comenzó a vender exquisitos panchos, un proyecto que refleja su pasión por la gastronomía y su deseo de emprender.
Leonardo, quien anteriormente trabajaba en una sandwichería, puso todo su entusiasmo en este nuevo emprendimiento al que llamó "El Lobito". Con el apoyo incondicional de sus padres, contó que logró dar vida a su panchera, que brilla con luces LED y se convierte en un punto de encuentro para los amantes de los panchos.
A pesar de su jornada laboral en la obra, donde trabaja de 8 a 6, se presenta cada noche en su panchera desde las 20 hasta la medianoche, listo para ofrecer su mejor servicio.
"Mi relación con los clientes es fundamental", dijo Leonardo con una sonrisa. "Siempre trato de ser amable y brindarles lo mejor".
Su dedicación y esfuerzo están dando frutos, ya que reconoce que, hasta ahora, le está yendo bien y tiene la firme intención de mejorar cada día para atraer a más clientes.
Leonardo Alemán es un ejemplo de cómo la pasión y el trabajo duro pueden abrir puertas. Con su camiseta de Gimnasia y Esgrima de Jujuy y su energía contagiosa, está demostrando que con voluntad se pueden alcanzar los sueños.